27/10/2025
“Hoy ladro en silencio desde donde estoy. No estoy en la tierra, pero mi espíritu sigue entre ustedes.
Recuerdo aquel día en que mis patas caminaron sobre el polvo y los escombros, no con miedo, sino con la certeza de que cada vida merecía ser encontrada. Yo no distinguía edades ni rostros, solo corazones latiendo que pedían ayuda.
Hoy quiero decirles que lo más grande que descubrí no estaba debajo de las piedras, sino en el alma de México: en las manos que se unieron, en los brazos que cargaron, en las voces que nunca dejaron de llamar.
No olviden que la verdadera fuerza no está en los uniformes ni en las botas, sino en la solidaridad que nos hace permanecer de pie, una y otra vez, después de cada caída.
Yo soy Frida, y aunque mis huellas ya no marquen el suelo, mi misión sigue viva en cada acto de bondad, en cada ayuda desinteresada, en cada abrazo compartido.
Sigan caminando juntos, sigan cuidándose unos a otros. Porque mientras lo hagan, yo siempre estaré con ustedes.”
