17/02/2025
Derivado de los recientes acontecimientos ocurridos con nuestro colega hacemos un llamado urgente a la sociedad para generar empatía y respeto a nuestra hermosa profesión, la cual nos costo trabajo, dinero y tiempo para poder formarnos y así tener los conocimientos para atender a nuestros pacientes; como con todas las profesiones.
Trabajamos para pagar cuentas, tener un hogar, una familia, alimentos y también gustos porque todos los merecemos y si no es obligación de ninguna profesión regalar su trabajo menos de la nuestra, es tiempo de levantar la voz y hacer ver que los veterinarios tenemos una alta taza de depresión, ansiedad y suicidio derivados de todo lo que sufrimos en nuestro día a día, ya que no solo tenemos que lidiar con el sufrimiento de las mascotas y la impotencia de no poder ayudarles como quisiéramos y salvarlos a todos, sino que también tenemos que sufrir violencia, amenazas y malos tratos por parte de propietario que solo se enfocan a culpar al medico sin ver el panorama completo.
Y no mentimos cuando decimos que todos los días hay este tipo de casos en una clínica veterinaria:
- El propietario que trae a su mascota después de días, semanas y hasta meses de estar enfermos y que exigen que con una inyección y sin estudios (porque no hay dinero) curemos a la mascota
- El propietario que trae a una mascota con síntomas severos e inespecíficos que requiere estudios para su diagnostico y que no quiere realizarlos porque solo "le queremos sacar dinero"
- El propietario que trae a su mascota y que se le da un diagnóstico que requiere hospitalización o medicamentos específicos y no accede a nada porque dice que no es lo que decimos que solo comió algo raro o que ha tenido otras mascotas con esa enfermedad y no era igual que solo queremos sacarle dinero
- El propietario que trae a la mascota y accede a tratamientos, hospitalizaciones o estudios, se le explica el panorama pero pocas horas después habla molesto argumentando que solo le quisimos sacar dinero porque su perro no se curó (ninguna enfermedad se cura en horas), y peor, pone un mal comentario en redes al día siguiente porque lo llevo a otro lado y ese doctor mágicamente lo curo con una inyección; siendo que ya tenía un tratamiento iniciado por nosotros que estaba empezando a hacer efecto y solo necesitaba tiempo para mostrar mejorías.
Son infinidad de casos y situaciones las que vivimos y aun así seguimos amando nuestra profesión y tratando de ser mejores por el bien de nuestros pacientes.
No estamos diciendo que seamos los únicos que sufren esto, muchas otras profesiones también tienen sus problemas, sin embargo, ya estamos hartos de no hacer nada, tampoco digo que todos seamos perfectos, como médicos nos equivocamos, pero jamás con la intención de dañar y siempre buscando hacer lo mejor posible para la mascota.
Vet Spot no es ajeno a todos estos acontecimientos, lamentamos profundamente todas las perdidas de colegas a manos de gente que no se tienta el alma, y gritamos desesperadamente “YA BASTA", estamos cansados de tener que caminar a tientas para no generar odio a nuestra profesión, estamos cansados de callar, aguantar y seguir como si nada, si que hemos sido víctimas de estos tratos y repudios hacia nosotras, se ha tratado de evitar situaciones molestas para ambas partes pero igual siguen ocurriendo, hemos cambiado formas de trabajar incluso por estos temas, a mucha gente no le ha gustado pero estamos cansados de que nos tomen a juego o que crean que no merecemos respeto, que crean que pueden venir cuando quieran a exigir y obligarnos a atenderlos dejando todo lo que estamos haciendo, que crean que pueden recibir un servicio y pensar que no merecemos que nos paguen poniendo como justificación que no tienen dinero pero quieren hacer algo por la mascota y es nuestro deber por ser veterinarios, que crean que les queremos sacar dinero solo por pedir estudios para poder realizar mejor nuestro trabajo, que se enojen porque no quisimos venderle un medicamento costoso en pagos, que nos pidan la dosificación de un medicamento que ya tienen por no comprar el que les mandamos y que después nos acusen de haber dado mal la dosis y decir que queríamos matar a su mascota porque la caja dice otra cosa, (cuando las cajas vienen con una dosis mínima para que los propietarios no intoxiquen a la mascota, pero los rangos son más amplios en realidad), que nos griten y amenacen por “maltratar” a una mascota lo cual no fue así y solo es super nerviosa y sale muy asustada (a pero cuando esa misma mascota muerde al veterinario fue culpa de uno por no quitarse básicamente).
Derivado de esto y muchas cosas más hicimos varios cambios, por eso ahora solo atendemos con citas para tener el tiempo de atender correctamente a cada mascota, tenemos que pedir anticipo para realizar los servicios porque nos dejan plantados y nuestros mensajes de confirmación vienen con una letanía para evitar malos entendidos y aun así no los leen y ocurren malos entendidos. Tenemos hojas y hojas de pagares que suman unos 80mil pesos de deudores, por lo que dejamos de dar facilidades de pagos, incluso después de eso llegamos a confiar en gente que juró con su vida que iban a pagar y solo se unieron a esas hojas.
La clínica genera gastos, renta, servicios, salarios, todo lo que se vende tuvo que ser pagado para tenerlo aquí, por lo que hay que realizar el cobro correspondiente, no nos volvemos millonarios porque nos hagas el pago de lo correspondiente créenos, y si salimos de vacaciones a donde sea es porque trabajamos duro para ello, ahorramos y nos las merecemos.
Todo tiene un límite por lo que ya no permitiremos que nos pisoteen y falten al respeto por hacer nuestro trabajo y no, no es falta de vocación, somos tan humanos como todos.