01/12/2025
🐱 Erika es una gatita semi-callejera que acude de urgencias a la clínica con su nueva tutora tras ser atacada y mordida por un perro.
- 3 y 4. En la exploración inicial 🩺 vemos que tiene dos zonas desgarradas: el abdomen caudal derecho, incluyendo glándula mamaria y el muslo derecho, abarcando tanto la cara externa como la rodilla. Por suerte, ningún desgarro ha llegado a la cavidad abdominal. 😮💨
- 5. Entramos a quirófano👩🏻⚕️ de inmediato y resolvemos la herida del abdomen, ya que al estar en una zona ventral, corre riesgo de aumentar de tamaño si no se cierra. Dejamos un drenaje colocado, pues al tratarse de un mordisco, se considera una incisión contaminada y corre riesgo de infecciones. De esta manera si se genera pus 🦠 puede drenar y no se acumula en las capas dérmica y muscular.
- 6. Desinfectamos el desgarro del muslo, aplicamos gel de manukka para estimular la asepsia y la cicatrización y dejamos que cierre por segunda intención (de forma natural).🩹 Elegimos está opción ya que si intentásemos suturar los dos desgarros la tensión en la piel sería demasiado y se volverían a abrir ambos. Primamos el desgarro abdominal por estar en una zona más crítica.
- 7, 8 y 9. Erika acude a revisiones cada 4 días, realizamos curas, desinfectamos y desbridamos el desgarro del muslo. Gracias a la colaboración entre nuestros veterinarios y la nueva tutora de Erika, que hace un trabajo fantástico en casa, en tan solo unas semanas ya le podemos retirar el drenaje, y en menos de dos meses la paciente acude a la última revisión con ambas incisiones totalmente cerradas y realizando vida normal😸🥳.