
20/04/2025
“Desde mi rincón”
Estoy aquí, quieto,
mirando cómo caminan entre rezos y cantos,
con pasos solemnes, con rostros serenos,
como si el cielo bajara con cada santo.
Yo no cargo una cruz,
cargo el abandono.
No visto de túnica,
mi piel lleva el lodo de tantos otoños.
Miran al frente, alzan los ojos,
pero no ven los míos,
esos que piden sin hablar,
que preguntan sin hacer ruido.
Tiran papeles, me pisan sin ver,
bendicen la calle que luego ensucian.
Oran por paz, por compasión,
pero dejan atrás miradas que suplican.
A veces me pregunto…
¿dónde quedó el amor del que tanto hablan?
¿No era esta semana para recordar
al que amó a los olvidados sin pedir nada?
Yo también soy criatura de este mundo,
también sangro, también siento frío.
Y mientras desfilan entre incienso y promesas,
yo solo espero un poco de abrigo.
No juzgo, no ladro, no interrumpo su fe,
pero mi alma, aunque peluda, lo ve:
que hay quienes caminan vacíos de esencia
mientras el amor se queda en los pies.
Créditos al autor del texto