12/01/2025
JUSTICIA PARA KÁISER
Káiser, Pirata y Hércules son tres hermanos caninos que llegaron a la vida de Don Franklin Gómez cuando tenían ap***s 22 días de nacidos. Los nombres de los tres perros no fueron elegidos al azar: Hércules, por su valentía desde cachorro; Pirata, por la mancha oscura alrededor de uno de sus ojos; y Káiser, porque se convirtió en el emperador vigilante de su hogar.
Don Franklin los cuidó como si fueran sus propios hijos. Les daba biberón cuando eran pequeños, aunque “esos cabezones masticaban el plástico”, recuerda con nostalgia. Han sido parte de su vida diaria, durmiendo con él en su hamaca, reconociendo su silbido y compartiendo su rutina. Para Don Franklin, no son solo perros: son familia.
Los tres han sido criados con amor y dedicación. Don Franklin no escatima en su alimentación diaria, asegurándose de que estén bien nutridos. Además, recibe apoyo veterinario constante, cumpliendo con las vacunas y chequeos regulares que garantizan su salud. Esta dedicación ha convertido a Káiser y Pirata en perros juguetones, protectores de los niños y cercanos a los vecinos.
Sin embargo, la paz de Káiser y Pirata se vio interrumpida por conflictos territoriales con otro perro del barrio. Las tensiones escalaron cuando comenzaron a circular rumores de que los atacarían debido a las peleas con este can. A pesar de que Don Franklin advirtió que cualquier agresión contra Káiser y Pirata sería un acto ilegal, el desenlace fue devastador.
El pasado martes 7 de enero, Káiser y Pirata tuvieron un nuevo enfrentamiento con el perro del agresor. En un acto de crueldad inhumana, el agresor atacó con un machete a Pirata, quien logró escapar herido. Káiser no tuvo la misma suerte: el hombre lo sujetó y, en un brutal ataque, mutiló sus testículos y le propinó alrededor de 11 machetazos. Gravemente herido, Káiser logró arrastrarse hasta la casa de unos allegados a Don Franklin.
Káiser fue sometido a una cirugía de tres horas, que requirió 82 puntos en total. Su recuperación es delicada y requiere cuidados extremos. Ante la falta de respuesta por parte del sistema judicial, Don Franklin ha decidido buscar familias que puedan adoptar a Káiser y Pirata para protegerlos de futuros ataques.
El Código Orgánico Integral Penal (COIP) establece en el artículo 250.1 que causar daño o lesiones a mascotas es un delito, sancionado con p***s de prisión de dos a seis meses, y hasta un año si se ejerce crueldad o tortura con intención de causar grave sufrimiento.
“Una persona así no es confiable. Imaginen: si intentó acabar con la vida de una mascota, ¿qué puede hacer con un ser humano?”, reflexionó Don Franklin.
Para exigir justicia, mañana 10 de enero se realizará un plantón en el Parque Central de Santa Ana a las 10:00 AM. La comunidad espera que este acto no quede impune y que se protejan los derechos de los animales, quienes son seres vulnerables y merecen vivir con dignidad.