16/07/2025
Simplemente inaceptable y reprochable. Es el colmo el descontrol en el que están los criaderos sean o no clandestinos.
Definitivamente cada vez más inconsciencia de gente que ignora los graves problemas de seguir comprando animales cuando hay millones abandonados, rescatados y esperando ser adoptados.
La castración es la clave al igual que la educación en la tenencia responsable de mascotas.
La “nueva raza mutante” de perros que se pone de moda en Colombia y alarma a los veterinarios: Una nueva tendencia está ganando terreno en Colombia, pero no precisamente por las razones correctas. Se trata de perros con características físicas extremas, conocidos popularmente como “razas mutantes”, que están siendo promovidos como mascotas de lujo y estatus en redes sociales. Sin embargo, tras su apariencia exótica, se esconde una realidad inquietante que ya ha encendido las alarmas en el mundo veterinario.
Estos animales suelen presentar cuerpos sin pelo, patas extremadamente cortas, arrugas profundas, ojos azules y colores de pelaje poco comunes como el merle o el albino. Si bien estas particularidades pueden parecer adorables o únicas, en muchos casos son el resultado de manipulaciones genéticas o cruces entre razas incompatibles, que conllevan severos riesgos para su salud.
Veterinarios colombianos han advertido que este tipo de perros no solo tienden a vivir menos, sino que también sufren desde temprana edad de enfermedades degenerativas, problemas cardíacos, ceguera, sordera y vulnerabilidad extrema a infecciones y a la radiación solar. Un ejemplo preocupante es el del bulldog francés sin pelo, cuya genética alterada ha generado casos de cáncer de piel, dificultades respiratorias y malformaciones óseas.
Lo más grave es que muchos compradores, cautivados por las redes, adquieren estos perros sin tener conocimiento de sus cuidados especiales o del sufrimiento que pueden padecer. Detrás de estas ventas, muchas veces hay criaderos clandestinos que priorizan la estética sobre el bienestar animal, donde las hembras son forzadas a reproducirse en cadena sin supervisión médica.
A diferencia de otras razas consideradas peligrosas por ley, estas nuevas “raza de diseño” no están reguladas. Eso significa que pueden ser vendidas libremente, muchas veces sin vacunas, sin controles veterinarios, y con altos precios que van desde los cinco hasta los veinte millones de pesos.
Los expertos piden mayor regulación y educación al respecto. También recuerdan que existen cientos de perros esperando adopción en refugios, muchos de ellos saludables, nobles y agradecidos. Adoptar con responsabilidad puede salvar vidas y evitar que modas pasajeras se conviertan en condenas silenciosas para los animales.
¿Y tú qué opinas? ¿Debe permitirse la comercialización de estas razas diseñadas? ¿Es justo poner en riesgo la vida de un ser vivo por estética o capricho?
Comenta y comparte esta historia si estás a favor de un amor verdadero por los animales, no basado en apariencias sino en respeto y cuidado.