13/12/2025
🐾 2021, el año que dolió, el año que encendió la voz
2021 fue un año de contrastes duros para Bienestar Animal Cuba. Por un lado, el trabajo no se detuvo en medio de la escasez y el agotamiento social, y por otro lado, llegaron golpes que atravesaron a la comunidad animalista por dentro. Fue un año en que BAC sostuvo la calle, sostuvo los rescates, y también sostuvo el alma, cuando tocó llorar y seguir.
🖤 La muerte de los animales del fundador, el dolor que se volvió determinación
En febrero de 2021, se reportó públicamente el envenenamiento y la muerte de perros vinculados al activista Javier Larrea, hecho que fue recogido por medios y generó una reacción de indignación y solidaridad masiva. Aquello no fue solo una tragedia doméstica, fue un mensaje brutal contra el movimiento y contra cualquiera que se atreviera a defender a los animales sin bajar la cabeza. Ese episodio quedó como una herida abierta y, al mismo tiempo, como un punto de no retorno para mucha gente que entendió que proteger también implica exponerse. 
📜 La lucha por una norma real, y el pulso alrededor del Decreto-Ley de Bienestar Animal
En abril de 2021 se publicó en Gaceta Oficial el Decreto-Ley 31/2021 de Bienestar Animal. Fue un momento histórico porque la presión social y animalista llevaba años creciendo, pero también fue un momento de debate fuerte: voces del movimiento señalaron omisiones relevantes y la necesidad de unidad y exigencia pública para que la protección no quedara en letra bonita y sanciones mínimas. En 2021, BAC y el movimiento animalista quedaron más visibles que nunca, empujando, criticando, proponiendo y recordando que sin aplicación real no hay bienestar. 
🎭 La primera gran campaña pública con artistas, cuando la adopción se hizo cultura
El 8 de agosto de 2021 se lanzó una campaña que marcó época: “No compres uno de raza, adopta uno sin casa”. Varios artistas se sumaron como padrinos y madrinas para visibilizar animales rescatados y promover adopción responsable, incluyendo mestizos, adultos y casos especiales. La campaña fue divulgada por medios y plataformas culturales, y se convirtió en un momento de madurez comunicacional: ya no era solo rescatar y publicar, era mover conciencia en lenguaje popular, con rostros conocidos y un mensaje directo que cualquiera podía repetir. 
🧭 Un año de presión, visibilidad y decisiones difíciles
Hacia octubre de 2021, medios reportaron una renuncia pública del fundador a la presidencia de BAC en un contexto de tensión, exposición y desgaste. Ese tipo de hechos también forman parte de la historia del año: cuando el trabajo crece y el costo personal se multiplica, la organización aprende a sostenerse con estructura, con equipo, y con una comunidad que no dependa de una sola persona para seguir salvando vidas. 
2021, en resumen, fue un año que no se recuerda solo por cifras. Se recuerda por el dolor que obligó a endurecer la piel, por la pelea por una protección legal real, y por la primera gran campaña pública que convirtió la adopción en un mensaje nacional. BAC no salió ileso, pero sí salió más consciente de su fuerza: la fuerza de una red, de una causa y de una idea simple que, cuando se vuelve colectiva, ya no hay quien la devuelva al silencio. 🐾