
15/08/2025
Comunicado
En los últimos días he sido objeto de reiteradas visitas por parte de autoridades municipales y otras entidades, derivadas de denuncias presentadas por algunos vecinos del barrio San Remo y del sector donde se encuentran los animales rescatados.
Ayer, en horas de la mañana, se presentaron representantes de la Personería Municipal de Ibagué, la Secretaría de Gobierno y el CAPA, y en la noche acudió también la Policía. Todo esto en un mismo día.
Ante esta situación, me pregunto: ¿es esto una persecución? ¿Cuál es la denuncia concreta si siempre he procurado actuar conforme a la ley y en beneficio del bienestar animal? El ladrido ocasional de los perros es un comportamiento natural y, en todo caso, un derecho inherente a su condición.
Hago un llamado a las autoridades y a la comunidad para que enfoquen sus esfuerzos en los lugares donde los animales realmente necesitan ayuda: sitios donde carecen de atención, están expuestos al maltrato, al abandono o incluso a la muerte. No en aquellos espacios donde, con dedicación y sacrificio personal, se les brinda un lugar seguro, cuidado y amor.
Nuestro tiempo, incluso el que deberíamos compartir con hijos y familia, lo entregamos en su totalidad a los animales rescatados. Nuestros recursos se destinan a sus necesidades diarias, razón por la cual, en muchas ocasiones, solicitamos apoyo económico para continuar con esta labor. Estamos asumiendo una responsabilidad que, en estricto sentido, corresponde a toda la sociedad y especialmente a las entidades que reciben recursos para la protección animal.
Insisto: ¿qué ilegalidad estoy cometiendo, si todo lo que hay aquí es trabajo, compromiso y ❤️ para proteger a quienes no tienen voz?